D A D D7
VivFA
Desde la altura de la cruz todo es distinto.
Dm
Todo se muestra tal como es ante ese Cristo.
Am
La dimensión de nuestras cosas se revela.
Bb Bbm
Sólo subsiste el amor alto e infinito.
(igual que la primera estrofa)
Un viento de violencias ruge por la tierra.
Vano temblor por afirmar quién es más fuerte.
Es un estrépito de envidias y rencores.
Y por encima de este oleaje ¡cómo emerge
Bb C Dm
*¡La altura luminosa de este Sol de Amor!
Desde el silencio de la cruz todo está dicho.
El mar de nuestros balbuceos se ha acallado.
Siempre tuvimos hambre y sed de esta palabra.
Y ahora Dios mismo es este Verbo pronunciado.
Desde el silencio de la cruz quedo en silencio.
Desde la altura de la cruz todo es más claro.
Todo se inclina ante el peso de este gesto.
En la elocuencia de la cruz calla lo humano,
(igual q el verso *)
...o en brazos de su Dios encuentra su lugar.
Desde la cruz cae el rocío de la calma.
La contundencia de este amor nos resucita.
Oscuridades no esclavizan más el alma.
Del manso río de Jesús mana la vida.
Desde la cruz callar, amar, reconciliarnos.
Reinterpretar lo que nos pasa y lo que somos.
¡Hay esperanza y paz por mundos y submundos!
La cruz descifra el cruce oculto y asombroso:
?Aquí está el hombre, y aquí está Dios?o en el lado oculto de la vida.
G A D D7
Yo voy por la vereda de la sombra.
G A Bm
Lo mío es el rumor de un arroyito,
G A D
el beso de la brisa entre las hojas.
Bm F#m G A
Y las flores de plástico me duelen:
Bm E
La tierra y las raíces me conmueven.
G A Bm F#m G A D D7
Vivo en el lado desnudamente humano de la vida.
Vivo en el lado sagradamente humano de la vida.
Vivo en el lado lento de la vida.
Amo lo que se gesta en el silencio:
Terco fluír del río en la llanura...
Los embarazos... Y el muy sabio invierno.
Soy figura emergiendo de la piedra.
Los montes me contagian su certeza.
Vivo en el lado pacientemente humano de la vida.
Vivo en el lado sagradamente humano de la vida.
Vivo en el lado tierno de la vida.
Voy desarmando fosos y castillos.
Ya no quiero ser duro pero muerto.
Prefiero vulnerable, pero vivo.
La falda de mamá... el olor de casa...
Y tu abrazo de amor que hoy me rescata.
Vivo en el lado entrañablemente humano de la vida.
Vivo en el lado sagradamente humano de la vida.
Vivo en el lado pobre de la vida.
Donde la sencillez airea tu casa.
Donde el ?Te necesito? no avergüenza.
Donde nace del alma el ?Muchas gracias?.
Donde nadie te lleva por delante
montado en ?supervidas importantes?...
Vivo en el lado pequeñamente humano de la vida.
Vivo en el lado sagradamente humano de la vida.
Vivo en el lado manso de la vida.
Le creo solamente a los pacíficos.
Por eso me avergüenzan mis violencias:
Quiero a mi corazón quieto en su nido.
¡Triste arrogancia de los ?ganadores?!
No subo el Monte Olimpo de esos dioses.
Vivo en el lado sufridamente humano de la vida.
Vivo en el lado sagradamente humano de la vida.
Vivo en el lado espeso de la vida.
Sangro la sangre de los doloridos.
No adoro ideas claras y distintas:
Dramático y más turbio es nuestro río.
¡Cruz de autenticidad esperando el alba...!
Y, oscuramente... Dios... eje de mi alma.
Vivo en el lado complejamente humano de la vida.
Vivo en el lado sagradamente humano de la vida.